jueves, 31 de enero de 2013

A 4 AÑOS DE LA DESAPARICIÓN DE LUCIANO ARRUGA

Hoy se cumplen 4 años de la desaparición de Luciano Arruga en manos de la maldita policía del conurbano bonaerense. Luciano era un chico como cualquier otro, pero se convirtió en símbolo de lo que el capitalismo y sus fuerzas represivas le tienen deparado a los que menos tienen. Y eso se vuelve aún más terrible cuando en un feriado por la Asamblea del año XIII, escuchamos a los obsecuentes de este gobierno hablar de libertad, de derechos humanos. Ojear los diarios alcanza para ver que los derechos humanos no existen, son una ficción, un cuento de hadas. Los muertos de la comunidad Qom son muestra de ello. Tuvieron que pasar cuatro años para que un juez tenga que aceptar que Luciano no había desaparecido por arte de magia, que la última vez que lo habían visto, agonizaba en un calabozo de una comisaría. Pero lo que sigue siendo como cuatro años atrás, es la impunidad, el silencio del gobierno y su complicidad.

A continuación trascribo el comunicado del Centro de Profesionales por los Derechos Humanos (CEPRODH) y acá pueden ir al post que colgaba el año pasado. 

A 4 AÑOS DE LA DESAPARICIÓN DE LUCIANO ARRUGA

Hay que redoblar la movilización independiente

Fecha: Jueves 24 de enero de 2013


por Alejandrina Barry, hija de desaparecidos y militante del Ce.Pro.D.H. y el PTS

Este sábado 26 se realizará un nuevo festival a cuatro años de la desaparición de Luciano, en el marco de dos avances en la causa. Ante el silencio oficial y las trabas del poder político, la verdad a gritos que manifestaron los familiares y las organizaciones solidarias demostró que Luciano había sido desaparecido por la Bonaerense.

Tuvieron que pasar cuatro años para que el juez Banco reconociera que Luciano no estaba perdido ni se había ido, sino que fue forzosamente desaparecido, como siempre denunciamos. La detención del otro policía acusado de haber torturado a Luciano meses previos es otra muestra contundente.

Desde el Ceprodh, junto al PTS y su juventud, seguiremos participando con nuestras fuerzas, así como lo hicimos desde el primer día, para redoblar esta pelea hasta conseguir la cárcel efectiva a todos los policías que asesinaron a Luciano y a los responsables de su encubrimiento. Particularmente, yo seré parte del panel de una de las charlas acerca de la lucha del pasado y el presente contra la impunidad, con referentes de la lucha por la cárcel a los genocidas y contra la represión de hoy. El primer punto de contacto que podemos encontrar entre estas dos luchas, es que las pruebas siempre son aportadas por los mismos familiares, ya sea en lo que se refiere a los responsables militares y civiles del genocidio como a las fuerzas represivas del Estado. Existe en ambos un total encubrimiento del poder político,  del cual dependen para su mantenimiento en el poder de los distintos gobiernos.

El otro punto reside en que sólo la lucha y la organización independiente del Estado es lo que permite llevar al banquillo de los acusados a los asesinos de las fuerzas represivas. En el caso de Luciano fue la organización y la movilización la que permitió que hoy, después de tantos años, tengan que reconocer que fue desaparecido. Así la causa de Luciano pudo ser conocida por millones en nuestro país.

Toda esta pelea se dio no sólo contra la justicia cómplice, sino contra los gobiernos nacional, provincial y municipal. El gobierno nacional, al igual que hizo con nuestro compañero Julio López, no lo nombró jamás en ninguna de sus largas cadenas nacionales. En cambio su política fue cediendo a los sectores de derecha y a los partidos de la oposición, militarizando las zonas más pobres del Gran Buenos Aires, como en la Matanza.

Asimismo dio un giro represivo con la criminalización de la protesta social, y puso como secretario de Seguridad al ex carapintada y teniente coronel del Ejército Sergio Berni, mientras intensificaba la represión a los luchadores obreros y populares que reclamaban sus legítimos derechos. El gobierno oculta que hay de 22 muertos por represión contra las organizaciones obreras y populares. El gobierno de Scioli es responsable directo de no haber desafectado a los policías responsables de la desaparición de Luciano, con las pruebas contundentes que pesan sobre ellos. El gobierno municipal de Fernando Spinosa, mientras demagógicamente sacaba afiches buscando el paradero de Luciano, abrió un destacamento mucho más grande, donde se siguen deteniendo a los jóvenes, particularmente amigos de Luciano, para intimidarlos y que cesen en su pelea por el juicio y castigo.

Al igual que los que venimos luchando contra los crímenes de la dictadura, esta política lejos de hacer bajar las banderas, hizo que los familiares siguieran con la misma fuerza, como ellos mismos dicen: “Luciano dejara de existir, el día que dejemos de luchar por él”.

Para hacer efectivos los avances en la causa necesitamos reforzar la movilización de los familiares, junto a todos los que hemos acompañado esta lucha, como los organismos de DD.HH. independientes, partidos de izquierda, organizaciones obreras y sociales. Ni el gobierno nacional ni ningún poder del Estado van a impedir que dejemos de luchar hasta el final por: Aparición con vida de Luciano. Juicio y castigo a los 8 policías asesinos responsables de su desaparición. Juicio y castigo por los miles de jóvenes asesinados por la policía. Basta de represión y criminalización de la protesta social.

Fuente: http://www.pts.org.ar/spip.php?article21932

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